NINFA LAVANDOSE LAS NINFAS
Es en el Paseo de la Isla, Burgos
En su ninfeo o lugar dedicado a las ninfas
En forma de gruta artificial
En la fuentecilla, en su exterior
Dedicada a las hijas de Gea, o de Zeus
Jóvenes diosas que personifican la vitalidad
Y fecundidad de la Naturaleza
Donde yo me vengo cada dos por tres
Porque me encanta ver a estas náyades
Rodeadas dentro de ese círculo luminoso de agua cristalina
En forma de redondo capullo
O nube de forma continua y color uniforme
Lavándose las ninfas (labios pequeños de la vulva)
En vez de cantar, bailar o hilar.
Yo les dirijo plegarias para que me sean propicias
Y hagan a mi Sexo brillar
Aunque pongan a mi pene morcillo
Estimulando el valor y la grandeza del mismo
Como se lo hicieron a Calipso
Zeus, Apolo, Hermes, Dioniso
Hesíodo, Homero, Teócrito
Virgilio, Horacio, Ovidio
Al mismo dios Pan, a Príapo y los sátiros
A Garcilaso de la Vega, Francisco de Aldana
Francisco de la Torre, Hurtado de Mendoza
Gutierre de Cetina
Rubens, Goujon, Coysevox, Dufy
Confiando en que, algún día
Salte alguna de ellas del charco
Se solidarice con mis penas de amor y pene
Y se enamore de mí como de Hilas
El amado joven de Heracles
El Hércules más prestigioso de la mitología griega
Quien, al sacar agua de un pozo
Fue atraído y seducido por ninfas enamoradas
Donde pereció ahogado en sus dominios acuáticos.
Yo no me voy a meter al agua
Atraído por estas mujeres jóvenes y bellas
Meretrices o putas del Paseo de la Isla
Y menos ahora que me encuentro
En el estado intermedio
En la metamorfosis de los insectos
(Una tercera edad con los huevos bien prietos)
Pero sí quiero, cuando nadie me vea, por supuesto
Hacer la niñada que hacía con otros niños
Cuando, desde la puerta de la Iglesia del pueblo
Nos sacábamos la pilila para mear lo más alto
Y ver quién llegaba hasta el campanario.
¡Yo lo conseguí dos o tres veces ¡
Ahora, sueño y deseo
Con sacarme el morcillo y poder llevar mi orina
Hasta los ninfómanos labios pequeños de la vulva
De la ninfa que adoro
Cualquiera que sea de ellas
Siempre hermosos e irritados
Y, si no puedo, que la ninfa despierte de su lavativa
Y vea el chorro de leche
Que escapa de mis partes
Formando una vía láctea sobre el agua
Que llega hasta ella.
--Daniel de Culla